El BCE supervisará todos los bancos de la eurozona
El BCE supervisará los más de 6.000 institutos crediticios que forman el sistema financiero dentro de la eurozona.
A partir de ahora, cómo condición para recibir las ayudas directas, el Banco Central Europeo supervisará todas las entidades bancarias de la zona euro. Michel Barnier, el comisario europeo de Mercado Interior y Servicios Financieros, así lo ha anunciado. Pero primero, los gobiernos de la zona euro junto con el Parlamento Europeo deben aprobar la propuesta de la Comisión.
En esta propuesta se especifica que los bancos que tengan problemas económicos podrán financiarse directamente del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) a comienzos del nuevo año 2013.
Esto es muy útil ya que las ayudas no pasarían por los Estados a los que pertenecen y por tanto al no tener que asumir los préstamos como propios no se contabilizarán como deuda pública. España presionó a los socios europeos en la cumbre europea del 29 de Junio, y ahora sabemos por qué tanta insistencia, será uno de los países beneficiados por este cambio. Por su parte, Barnier ha dejado claro en el periódico alemán Süddeutsche Zeitung que le darán al BCE todos los instrumentos que sean necesarios para que pueda mantener el control de todos los bancos de la forma más efectiva posible.
Esta supervisión bancaria empezará a funcionar progresivamente, a partir del mes de enero todos los bancos que hayan necesitado fondos de rescate empezarán a estar controlados. Después, a comienzos del mes de julio se supervisarán los bancos que sean relevantes para el sistema financiero, es decir, los grandes bancos.
Finalmente, en enero del 2014 sí todo marcha cómo lo esperado, todos los bancos deberían estar supervisados por Bruselas.
La propuesta de ley será presentada de manera oficial el 12 de septiembre según nos revela el comisario europeo. Asimismo, advierte que el control de todos los bancos de toda la eurozona, los 17 países, será vinculante y obligatorio. Además, ha comentado que aquellos países de la Unión Europea que no formen parte de la Unión Monetaria también podrían sumarse voluntariamente a este control.
Sin embargo, para Alemania es absurdo y exigen que se supervise sólo a los grandes bancos, a los que sean más relevantes para el sistema financiero.
Berlín ha propuesto limitar esa supervisión a 45 de los grandes bancos de la eurozona, dejando fuera a las entidades pequeñas por supuesto. Advierte que no deberían repetirse casos como los de Bankia, un banco aparentemente de poca relevancia que ha necesitado enormes operaciones de rescate estatales.
Alemania insiste en que por sentido común no se puede vigilar a todos, es prácticamente imposible. El ministro de finanzas alemán Schäuble advierte que no pueden esperar crear un vigilante europeo que supervise todas las entidades de la región, ya que pueden plantear un riesgo sistémico a nivel europeo. En el área económica del gabinete de Merkel opinan que es crucial que el sistema sea efectivo y no pura fachada.
Asimismo, advierte de que el esfuerzo del BCE para convertirse en un supervisor bancario único debe garantizar una separación estricta entre la tarea de supervisión y los asuntos de política monetaria.